viernes, 20 de febrero de 2009

HA OCURRIDO UNA EXPLOSIÓN

Acabo de leer en la página de “El Comercio” que en setiembre del 2008 el telescopio Fermi de los Estados Unidos registró una descomunal explosión de rayos gamma en el universo, aquí nomás, a 12 mil 200 millones de años luz de la tierra, o sea más o menos 115 mil 421.76 trillones de kilómetros: 115.421'''760.000''000.000'000.000 kilómetros. Casi nada ¿No?
En la misma nota se menciona que según estimaciones científicas, el universo se habría originado por la denominada explosión “Big Bang” hace 13.700 millones de años. (En realidad la nota refiere erróneamente “años luz” cuando dicha unidad de medida, como se ha visto antes, corresponde a distancia y no a tiempo). O sea que la edad de nuestro universo sería de 13.700'000.000 años.
Además de evidenciar la insignificancia de las dimensiones humanas en la inmensidad del universo, tanto espacial como temporal, toparse con esta inconmensurabilidad de tiempo y espacio es lo que condujo al ilustre pensador peruano Oscar Miro Quesada de la Guerra, más conocido como “Racso” a formular su interesante tesis respecto a la práctica imposibilidad de que dos civilizaciones inteligentes pudieran llegar a establecer contacto ya que para ello tendría que existir una remotísima coincidencia tanto de espacio como de tiempo. Con cantidades tan descomunalmente exorbitantes esa posibilidad se vuelve nula.

jueves, 19 de febrero de 2009

SE BUSCA CONTRALOR

Las increibles postergaciones y dificultades para concretar un trámite tan sencillo como es el de designar a un nuevo Contralor de la República no hace sino evidenciar la conveniencia para el gobierno de turno de no contar con organismo fiscalizador alguno.
Porque resulta inaceptable tener que admitir que el oficialismo tuviera que escoger justamente a una profesional con tan frágil y cuestionable currículum como la señora Ingrid Suárez, entre tantos profesionales de transparente trayectoria y con su documentación probatoria en regla, para proponerla como la integrante de la terna que finalmente fue considerada como la candidata más próxima a asumir tan importantes responsabilidades.
La Contraloría General de la República requiere con urgencia que se le dote del conductor probo, neutral, independiente, capaz, valiente y honesto, que pueda investigar, sin temores y sin exponerse a chantajes ni a devolución de favores políticos, cuanto asunto de dudosa gestación se presente ante sus ojos.
Si los congresistas dejaran de lado cálculos políticos y arreglos bajo la mesa, hace rato habrían ya determinado otro procedimiento que agilice y posibilite la pronta designación de un Contralor idóneo, evitando de este modo caer en el juego oficialista de dilatar una elección que entorpezca y comprometa la ejecución de acciones no del todo claras y transparentes.

sábado, 14 de febrero de 2009

POESÍA

La poesía debe ser universal. No debe estar constreñida a una sola lengua, a un solo idioma. Debe sonar hermosa leída en la lengua en que fue originalmente escrita, pero también si es traducida a cualquier otro idioma.
Y aun cuando debo confesar que hasta hace poco era un acérrimo defensor y propulsor de la poesía rimada, consonante, rítmica, hasta cacofónica, y cuando leía un poema completamente exento del menor atisbo de rima o consonancia me preguntaba qué clase de poesía podía ser esa si no tenía la cadencia y el ritmo de un poema como aquel, por ejemplo, del tacneño Federico Barreto, “El Beso”: Con candoroso embeleso / y rebosante alegría / me pides, morena mía, / que te diga qué es el beso. / Un beso es el eco suave / de un canto, que más que canto / es el himno sacrosanto / que imitar no puede el ave. / Un beso es el dulce idioma / con que hablan dos corazones / que mezclan sus impresiones / como las flores su aroma. / Un beso es... ¡No seas loca! / ¿Por qué me preguntas eso? / Junta tu boca a mi boca, / y sabrás lo que es un beso.
Hermoso. Qué duda cabe. Y prolijamente rimado. Sin embargo su belleza y armonía quedan limitadas a quienes hablamos, entendemos y nos comunicamos en español. Pues si se le traduce al inglés, francés, italiano, japonés, chino, o cualquier otro idioma, dialecto o lenguaje, sin adulterar en lo más mínimo su contenido y mensaje, seguramente perderá gran parte de su encanto al quedar altisonante y absolutamente exento de esa rigurosa rima que lo adorna.
Pero, echémosle una ojeada al hermoso Poema 5 del chileno Pablo Neruda: Para que tú me oigas / mis palabras / se adelgazan a veces / como las huellas de las gaviotas en las playas. / Collar, cascabel ebrio / para tus manos suaves como las uvas. / Y las miro lejanas mis palabras. / Más que mías son tuyas. / Van trepando en mi viejo dolor como las yedras. / Ellas trepan así por las paredes húmedas. / Eres tú la culpable de este juego sangriento. / Ellas están huyendo de mi guarida oscura. / Todo lo llenas tú, todo lo llenas. / Antes que tú poblaron la soledad que ocupas, / y están acostumbradas más que tú a mi tristeza. / Ahora quiero que digan lo que quiero decirte / para que tú las oigas como quiero que me oigas. / El viento de la angustia aún las suele arrastrar. / Huracanes de sueños aún a veces las tumban. / Escuchas otras voces en mi voz dolorida. / Llanto de viejas bocas, sangre de viejas súplicas. / Ámame, compañera. No me abandones. Sígueme. / Sígueme, compañera, en esa ola de angustia. / Pero se van tiñendo con tu amor mis palabras. / Todo lo ocupas tú, todo lo ocupas. / Voy haciendo de todas un collar infinito / para tus blancas manos, suaves como las uvas.
Hermoso también, qué duda cabe. Y sin el menor atisbo de rima. Pero con esa armonía tan propia y peculiar de la poesía de Neruda. Con música. Que, aunque no soy un políglota, asumo que igual lo percibirían quienes lo leyeran, traducido, tal cual, a cualquier otro idioma, dialecto o lengua del planeta.